31 octubre, 2009
28 octubre, 2009
27 octubre, 2009
Wittgenstein. Tractatus Logico-Philosophicus
3.221 A los objetos solo puedo nombrarlos.Los signos hacen las veces de ellos. Sólo puedo habla de ellos, no puedo expresarlos. Una proposición sólo puede decir cómo es una cosa, no lo que es.
¿Quien dijo que no diría tres veces el verbo y huiría?
¿Quién habló del llorar peces y crucificar a los pájaros?
¿Quién habló del llorar peces y crucificar a los pájaros?
23 octubre, 2009
19 octubre, 2009
Confesión
No puedo escribir. Hay un pájaro errante en mi cuerpo que se desnuda, todas las noches. Se desnuda y me abre su boca como esperando que entre dentro de su cuerpo que a su vez está dentro del mío. Como si pudiese reconocerme por estar más adentro, escondida. Más adentro que de mi se esconda el pájaro-poema, amenazo. Como si el canto fuese al unísono amor de poema, naufragio. Qué desierto que tiembla en su iris, preciosa niña. Que desierto que en tu lengua crece como pelo enredado. He pensado en espacios. Paisajes desolados con muertes enterradas al Sur: tierras de fuegos, tierras de lentos cánticos que se mueven, y yo aúllo. No se que movimiento hacen mis labios ni que maldiciones padezco. No se si mi voz es sólo mi voz o son los últimos gritos del sacrificio. No sé si estoy arrastrándome por las líneas como una presa sin ojos que trata de matarse antes de huir sólo porque no escribo.
No se si es verdad que no puedo escribir, o es sólo que no quiero hacerlo. No sé escribir
No se si es verdad que no puedo escribir, o es sólo que no quiero hacerlo. No sé escribir
13 octubre, 2009
El último de los Templos
He levantado el último de los templos.
A petición del Dios (único Dios)
sus paredes son tumbas de palabras sin dueño.
He querido orientarlo al Sol
pero la luz, la única luz
hace al verbo definición y lo transforma.
El último de los palacios se ha erguido en la memoria.
Terrenes infértiles lo seducen. LLegó un tuerto a bautizarlo.
Con su ojo inexistente busca la otra mitad del nombre.
Da vueltas sobre sí el único nombre.
Con el tiempo los hombres olvidaron el espacio que habitó,
el único espacio del desierto donde los fieles
muertos y cansados, lo aclamaban.
Todo quedó como una suerte de conjuro,
la leyenda de una religión sin lengua.
A petición del Dios (único Dios)
sus paredes son tumbas de palabras sin dueño.
He querido orientarlo al Sol
pero la luz, la única luz
hace al verbo definición y lo transforma.
El último de los palacios se ha erguido en la memoria.
Terrenes infértiles lo seducen. LLegó un tuerto a bautizarlo.
Con su ojo inexistente busca la otra mitad del nombre.
Da vueltas sobre sí el único nombre.
Con el tiempo los hombres olvidaron el espacio que habitó,
el único espacio del desierto donde los fieles
muertos y cansados, lo aclamaban.
Todo quedó como una suerte de conjuro,
la leyenda de una religión sin lengua.
08 octubre, 2009
Geometrias no Euclidianas
La esfera
donde todo se vuelve. Iniciamos el viaje padeciendo la curva
ascendemos
cuando todo regresa el tiempo se ha extinguido.
La esfera
donde el límite impreciso hace la noche al verbo
la palabra declina
el último de los pájaros abre sus plumas
La esfera
el mirarse desde un punto fraccionado
cosido después, cubierto.
La esfera que no tiene centro y se busca.
Me busco como la esfera
giro y muero y describo como la esfera.
donde todo se vuelve. Iniciamos el viaje padeciendo la curva
ascendemos
cuando todo regresa el tiempo se ha extinguido.
La esfera
donde el límite impreciso hace la noche al verbo
la palabra declina
el último de los pájaros abre sus plumas
La esfera
el mirarse desde un punto fraccionado
cosido después, cubierto.
La esfera que no tiene centro y se busca.
Me busco como la esfera
giro y muero y describo como la esfera.